La Torre de Don Borja, en Santillana del Mar, acogió el pasado 22 de abril un emotivo encuentro entre el dibujante e ilustrador José Ramón Sánchez y su hijo, el director de cine Daniel Sánchez Arévalo. Ambos creadores gozan de un gran prestigio y reconocimiento por su trabajo. En el encuentro, hablaron sobre sus trayectorias artísticas y sobre cómo se han inspirado el uno en el otro. El diálogo, plagado de anécdotas y buen humor, permitió conocer cómo padre e hijo se han inspirado y acompañado mutuamente a lo largo de los años.

José Ramón Sánchez (Santander, 1936) alcanzó mucha popularidad en los años ochenta al participar, como dibujante, en el programa sabadabadá, que emitía TVE. Es considerado por muchos como el gran impulsor de la ilustración española en aquellos años, de su renovación y de su visibilidad. Ilustró libros educativos de la editorial Santillana y son muy valoradas, también, sus versiones Don Quijote, La Biblia, Moby Dick, La Divina Comedia y El Beato de Liébana. Su trayectoria, muy influida por el cine, le mereció el Premio Nacional de Ilustración en el año 2014.

Daniel Sánchez Arévalo (Madrid, 1970) es guionista, director de cine y escritor. Ha dirigido cinco largometrajes y su debut en el cine, con AzulOscuroCasiNegro, mereció el premio Goya a la mejor dirección novel y cosechó medio centenar de galardones. Son también conocidas sus películas Primos, Gordos, La gran familia española y Diecisiete. Como escritor, fue finalista del Premio Planeta con La isla de Alice. Sánchez Arévalo ha manifestado en varias ocasiones que  nació en Madrid por error y que él es cántabro y se siente cántabro y que tiene siempre la necesidad de buscar el norte a nivel profesional y vital.